Año 123 d.K. (Después de Katalina). Hace más de cien años que la “Gran Guerra” llego a su fin, y la única cuidad que sobrevivió, ahora se había convertido en la sede del dominio. “Nuevo Londres” como decidió llamarlo su reina Katalina, quien peleo fervientemente en la “Gran Guerra” para poder salvar su más preciado tesoro, su nación.
Nada sobrevivió. La tecnología de ese entonces, se evaporo como el agua al sol. Autos, computadoras, celulares; todo se perdió en la guerra. Nadie recuerda cómo eran las cosas en la llamada “Era de Cristo”. Los más viejos divagan o mueren antes de tan siquiera decir una palabra de los tiempos oscuros. Ahora todo es diferente. La llamada época Victofuturista es lo que todos conocen. Vestidos y corsés. Trajes de etiqueta y relojes de bolsillo.

Un nuevo orden se ha establecido en “Nuevo Londres”. La tasa de delitos es de 0% y la hambruna es casi nula. Pero, todo ese orden se debe a la “Aristocracia de la Rosa” la cual fue fundada en el año 2013 d.C. (Después de Cristo) por la reina Katalina, quien llevo a la “Aristocracia de la Rosa” por el camino de la rectitud, y siempre manteniendo el lema de, “Nuestro pueblo es lo primero, nosotros venimos después”. Esos tiempos fueron prósperos y llenos de avances tecnológicos en el mundo del vapor. Autos, barcos, dirigibles y avionetas que funcionaban con vapor. Prótesis de cobre que ayudaron a los soldados que pelearon en la gran guerra, e incluso órganos mecánicos que ampliaban la vida de la gente. Sin embargo, las cosas han cambiado desde la muerte de la reina. La Aristocracia ha tomado otro camino, construyendo un nuevo imperio, dominado por el “Mandato de la Rosa”. Una ley que según la Aristocracia, la reina Katalina escribió, estipulando que después de su muerte, las cosas deberían hacerse con un régimen totalmente dictador.

Tomaron lo que anteriormente su reina había utilizado para renovar a su nación, y crearon soldados semi-mecanicos, armas letales y sobre todo, un dirigible enorme llamado “The Rose”, en donde solo la clase alta de “Nuevo Londres” vive, alejado de la inmundicia que han dejado en la tierra. Claro, la tasa de índices sigue igual, pero es el miedo el que tiene así el status de “Nuevo Londres”. La población sabe que meterse en problemas es meterse con la Aristocracia, así que prefieren conformarse con lo que tienen que luchar por lo que alguna vez su reina Katalina les había dado. Aunque unos pocos han dicho ¡BASTA! Y formaron una escuadrilla llamada “Radicales” intentando poder derrocar a la Aristocracia de la Rosa y poder restablecer lo que algún día, fue el imperio de la reina Katalina.